Hacía casi 8 años que Raúl no bajaba al sótano. El olor a moho siempre le pareció repugnante y fue su excusa para evadir la insistencia de Luisa de organizar aquel piso bajo. Cuando abrió la puerta para bajar las 13 escalas, frunció la nariz y sintió un extraña opresión en el pecho. Bajó con cuidado. Todo el tiempo se sintió escoltado, no acompañado, por la mujer con la que convivía hace 15 años.
El calor del verano era insoportable, señal directa de un cambio climático irreversible. A Raúl le pareció que la temperatura alta concentraba aún más el aroma añejo que salía desde las cajas que estaban apiladas en un caótico desorden en el piso de aquella pequeña habitación. Se preguntó la razón por la que había evitado tanto tiempo volver a ese oscuro sótano. Cuando estaba a punto de responderse, encontró el interruptor y prendió el bombillo pelado que iluminó tenuemente el silencioso sótano.
Lo primero que vio Raúl fueron las ocho cajas, las tres sillas rotas, algunos libros, las dos bicicletas oxidadas y el pequeño baúl que estaban en el piso. Todo estaba cubierto de polvo y lleno de telarañas. Lo segundo, la cara inquisidora de Luisa, que parada a la izquierda suya, paneó con rabia la habitación de lado a lado. Lo tercero, las sombras que se proyectaban por todas partes y que ocultaban algunas carpetas con papeles olvidados en el piso. Para él, todo en aquella habitación, excepto el pequeño baúl, estaba en la categoría de "cosas viejas, reunidas en el tiempo, posiblemente útiles y valiosas, pero fácilmente botables". Para ella, no había más que basura y un baúl que nunca había visto".
- "Solo recuerdos que ya no importan", respondió Raúl.
Hermoso cuento JJ, con un romanticismo propio de tiempos idos, de seres que aún creen que el amor vence el tiempo.
ResponderEliminarY lo vence!
EliminarUn gran saludo.... siempre existirá las intensas de las Luisa y el mejor estrategia para entenderla es hacerse el loco y hacer lo que uno quiera....👏👏👏
ResponderEliminarEl secreto no es lo segundo (haces el loco) sino lo primero (entenderla) Saludos
EliminarAlgún día necesitamos los recuerdos para vivir el presente e impulsar el futuro.
ResponderEliminarLos necesitamos sí, pero no pueden condicionarnos!
EliminarQue fuerte…. Me encantó!!!
ResponderEliminarLa vida siempre será fuerte!
EliminarFran final! Me gustó muchísimo. Aplausos!
ResponderEliminarMil gracias!
EliminarMe encantan tus cuentos y adoro los finales 👌🏼
ResponderEliminarme encanta que te encanten!
EliminarTodos estamos hechos de olvido y una Luisa que no falta en nuestro propio baúl.
ResponderEliminarUnos estamos hechos de olvidos, y otros de recuerdos!
EliminarA mi Doralba no me deja botar nada , ella misma lo hace y sin permiso JJ q hago ? Bueno lo q importa es que no le bote a mi. Un abrazo tu y tus finales que cosa por Dios Un abrazo hermanazo
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