sábado, 27 de octubre de 2012

Sueño en seco

El insomnio era su estado permanente, pero ese jueves fue la excepción: había dormido plácidamente. Tal vez por eso, en la mañana de aquel viernes septembrino se despertó abruptamente y muy intranquilo. La mujer que noche a noche lo desvelaba, se le había aparecido en sueños. 

domingo, 14 de octubre de 2012

Fenómeno de la niña

La lluvia de la tarde se confundía con su llanto. Eran las seis, el aguacero comenzó a la una y ella lloraba desde las tres. Pensó que su nombre no era casual. Después de una larga temporada calurosa, el corazón de Magdalena estaba azotado por un frío invernal. Ya no amaba, sino que sufría. Ya no ardía de pasión sino que sentía que su cuerpo congelaba sus deseos. Esa tarde, mirando la lluvia pertinaz, lamentó vivir en el trópico, donde no había estaciones; sino fenómenos infantiles. 

domingo, 30 de septiembre de 2012

Rostro y cuerpo

La única vez que vio aquel rostro fue en un aviso publicitario publicado en una revista de circulación nacional. Esa imagen fue suficiente. Han pasado casi 5 años desde entonces. En el día, la revista se pasea por consultorios odontológicos. En la noche, mientras el escritor construye una novela inspirada en aquel rostro, el cuerpo que lo soporta se exhibe en cocteles insípidos que no inspiran a nadie. 

jueves, 27 de septiembre de 2012

Dolor profundo

La vieja lesión de la columna volvió a molestarlo. El dolor esta vez se hizo insoportable. Era miércoles y el día estaba nublado. Quiso salir a la tienda a comprar algo para el desayuno, pero fue imposible. En una noche de desvelo total, tanto su cuerpo como su vida habían perdido la poca estabilidad que les quedaba. Decidió esperar unas horas para levantarse... El dolor de la columna se calmó en la tarde. El del alma lo está matando lentamente. 

lunes, 17 de septiembre de 2012

Fantasma

La última vez que le vieron por el barrio fue un viernes de agosto. Lucía una barba en desorden y un cabello que empezaba a crecer. Había perdido peso y su desaliño era evidente. Estaba irreconocible, pero también, desconocido. No saludó a don Miguel en la tienda ni miró para la casa de doña Carmen, donde siempre estaba Lucía tentándolo en el balcón. Cuando se cruzó con los muchachos del parche desvió la mirada. Hacía apenas dos meses que había anunciado en su casa que se iba porque quería buscar su esencia; y la encontró. Por eso, aquella figura que cruzó por el barrio el viernes no era más que un fantasma, que nunca volvió. 

lunes, 10 de septiembre de 2012

Letra muerta

Isabel era terca, por eso nunca declinó en su iniciativa de desarrollar un proyecto emprendedor. Tuvo tienda, vendió minutos de celular, montó una papelería, comercializó productos de belleza, fracasó con una peluquería y durante algún tiempo luchó con la venta de chance y lotería. No tuvo fortuna y nunca logró un buen capital. Su terquedad la llevó a luchar con las letras y a meterse en un proyecto editorial; fue lo último que quiso hacer en la vida. Invirtió sus últimos 12 años de vida en una novela, que como proyecto hizo honor a su título: "Letra muerta".  

martes, 17 de julio de 2012

Sin rumbo alguno

Federico salía a trotar todas las mañanas. No tenía ruta definida. Recorría cualquier calle, carrera o autopista hasta sentir el cansancio. Cuando estaba exhausto, simplemente detenía su paso, tomaba un taxi y regresaba a su casa para bañarse y salir rumbo a su trabajo. Así lo hizo durante los 26 años que estuvo vinculado a su empresa como auxiliar de contabilidad. El viernes fue su último día en la oficina, pues la carta de jubilación le llegó hace un mes. Ayer lunes intentó salir a trotar; pero esta vez no supo qué camino coger.

domingo, 15 de julio de 2012

Desenlace

La vida le había enseñado a esperar con paciencia: para terminar sus estudios tuvo que postergar varios semestre mientras solucionaba asuntos económicos; para conseguir un trabajo digno tuvo que pasar primero por bares y cantinas en oficios de mesera; y para conseguir el amor de su vida tuvo que aguantar primero numerosas decepciones y engaños. La paciencia que no tuvo de joven, la adquirió como virtud gracias al paso de los años y de las contingencias de su vida. Por eso, aquella tarde que salió de la cita con el oncólogo decidió esperar con calma el desenlace anunciado. Han pasado 16 años, y ella sigue apoltronada con resignación.  

lunes, 25 de junio de 2012

Los reencuentros

Los reencuentros nunca son casuales. Con esa tesis creció Bibiana desde niña. Cada que la vida le ponía en el camino lo que todos llamaban casualidades, ella las entendía como algo lógico que a alguna agenda debían obedecer. Esos sucesos eventuales tenían lógica para ella.  Por eso, la vida no la sorprendió el día que le puso nuevamente en el camino a Simón, el hombre que en dos ocasiones le había roto el corazón. Este tercer encuentro fue definitivo. Ella quedó tranquila después de decirle todo lo que se había guardado por años y quedó con la certeza de que en el futuro Simón volvería a aparecer.

lunes, 11 de junio de 2012

Punto de equilibrio

Entre problemas y discusiones, Angélica y Juan Carlos se pasaron la vida tratando de encontrar un punto de equilibrio para su relación. 22 años después de su matrimonio, justo cuando se decidían a no buscarlo más, lo hallaron. Estaban felices. Ignoraban que tres semanas después el detonante para que su relación terminara sería precisamente ese: que aquel edificio tan grande tenía el equilibrio tan solo en un punto; y se derrumbó.

sábado, 2 de junio de 2012

Madurez

Durante 20 años, Wilmar esperó de la vida una segunda oportunidad. Aunque siempre pensó que en la primera no había contado con suerte, con el paso de los años entendió que le había faltado madurez para aprovecharla. Siempre le decía a sus amigos en tono lacónico que la vida es una película que nunca tiene replay, pero aguardaba un momento de lucidez para repetir sus experiencias de juventud. Cuando menos lo esperaba, cuatro lustros después y por pura casualidad, la vida lo puso a repetir. Sin embargo, Wilmar consideró que ya era demasiado maduro para hacerlo y dejó pasar aquella nueva opción. 

sábado, 19 de mayo de 2012

Xelenia

Nunca conocí personalmente a Xelenia, pero siempre dije que tenía cara de ser una mujer perversa. Fría y calculadora en asuntos profesionales, decían. Sin corazón y sin alma, comentaban sus allegados. Esta semana, leyendo la prensa, descubrí que su maldad como su vida no le pertenecen; una malvada titiritera la maneja con 18 delgados hilos.

sábado, 5 de mayo de 2012

Chaparrón de vida

A Laura la lluvia siempre la ponía melancólica y trascendental. Desde su ventana, veía caer las gotas con la misma velocidad a la que pasaban sus días. Cada aguacero era para ella un ejercicio de matemática inversa: contaba y contaba goteras interminables de lluvia, para contrastar sus cifras con las cuentas de los días que le quedaban por vivir. Laura sabía que en el chaparrón de  su vida empezaba a escampar.

martes, 3 de abril de 2012

A pie

Caminar en las mañanas fue su vicio durante años. Ni la lluvia, ni el frío, ni los habituales malestares que padecía, ni las olas de inseguridad que llegaban a su barrio con cierta frecuencia impidieron que lo hiciera. Las 5 de la mañana en el reloj era la señal para iniciar su ritual; caminar era su procesión sagrada. Lo hacía desde que tenía uso de razón y quería hacerlo hasta el fin de sus días; pero no contaba con que un día de abril las calles de su barrio se acabarían por el uso constante que él les daba. Desde entonces, ya no tuvo por donde caminar.  

viernes, 16 de marzo de 2012

Lucero

Su menuda figura hacía rima con su apellido. Tenía un acento costeño, adoptado en sus 5 años como promotora comercial en Barranquilla, con el que llenaba todos los rincones de la cafetería que frecuentaba. Sus curvas eran tan peligrosas como las de la estrecha calle que conduce al barrio alto en el que ha vivido desde niña. Era una mujer mal empacada, pues tenía una personalidad y un corazón que no cabían en su pequeño cuerpo. Tal vez fue esa la causa para que un día, luego de una dura discusión con Giovanny, se reventara por dentro. Desde entonces, no se sabe nada de ella, pero su espíritu impregna el aire, y cada que alguien respira siente la sensación de que la está oliendo.

lunes, 12 de marzo de 2012

Amor de bits

Juan David tenía los dedos ampollados de tanto usar la comunicación vía pin; era un joven corto de palabras, enseñado a decirlo todo con menos de 140 caracteres; su mejor gesto era un emoticón que sonreía, y la única actividad social que tenía se limitaba a sus etiquetadas en el face. No cabe duda, era un hombre postmoderno. Una noche, desde la ventana de su cuarto, vio pasar por la calle a la mujer que por primera vez le despertó sentimientos reales. Quiso amarla, pero nunca encontró la clave para acceder a ella.

martes, 6 de marzo de 2012

Decisión ejecutiva

Juan Andrés era un ejecutivo exitoso. Joven, soltero, con un buen capital y un reconocimiento público amplio. Realmente era muy bueno en los negocios. Trabajaba en una de las compañías de telecomunicaciones más importantes del continente. Allí, diariamente tomaba whisky y decisiones importantes. Su único pecado fue dejar que las tareas cotidianas se le convirtieran en problemas complejos. Una noche, en una reunión de una de tantas juntas, cuando quiso confesárselo a su jefe, entendió que su pecado era mortal. Aquella noche, desapareció. 

domingo, 19 de febrero de 2012

Ofelia

Su origen pueblerino quedaba oculto tras un vestuario de dama elegante que sabía lucir con cierta naturalidad. Había aprendido un lenguaje demasiado culto; algo subido cuando lo usaba en su actividad comercial. Trataba de acomodarse en un círculo social al que le ocultaba su origen humilde en una vereda olvidada hasta en los mapas municipales. En ese  mundo, cometió el sencillo error de enamorarse de un hombre sin ideales. Le desnudó su alma. Desde entonces,  le quitaron la membresía del ostentoso club.  

martes, 14 de febrero de 2012

Político barato

Checho era un político barato con un estilo de vida costoso. Al tiempo que compraba votos, pedía puestos y pagaba favores sin que nadie supiera, vivía en una mansión, era socio de un prestigioso club, cenaba caviar e iba a la ópera.  A sus 40 años. el amor lo tomó por sorpresa, porque los sentimientos no hacían parte de su calculadora vida. Su pareja, un hombre joven y pobre, le enseñó el valor de las cosas simples, sencillas y cotidianas.  

Desde que comenzó su relación dejó el caviar, el club y la ópera. Tampoco compra votos, paga favores ni pide puestos. Ya no tiene tiempo ni para hacer esas cosas, el amor se lo copa todo.

jueves, 9 de febrero de 2012

Luces y sombras

La hora preferida de Gerardo era la noche, porque en ella se planteaba todas las preguntas. En el día, los interrogantes desaparecían y para él eran horas de tedio. Gerardo era un hombre como todos, lleno de dudas e incertidumbres, pero a diferencia de los demás, la luz solar le llenaba la cabeza de oscuridades.  Una noche, a  comienzos del año, se le fueron totalmente las luces.

jueves, 26 de enero de 2012

Pregunta

Los interrogantes fueron demasiados. Fueron tres noches seguidas en vela tratando de resolver muchas preguntas. Tras no encontrar las respuestas, al amanecer del jueves, Pipe entendió que su vida, como la de todos, no era más que un acertijo idescifrable. Conciliar el suño fue la primera respuesta.  

miércoles, 4 de enero de 2012

Enfermedad terminal

La enfermedad de César era terminal. No quería que nadie se enterara, pero en estos tiempos postmodernos las redes lo divulga todo. Aunque todos los sabían, César creía que se estaba muriendo en secreto. El día de falleció el médico que realizó la autopsia dijo con asombro: "No murió de cáncer, lo mataron la distancia y la soledad".

martes, 3 de enero de 2012

Indigente profesional

Humberto era un profesional mediocre, pero tenía la suerte y las relaciones suficientes para saltar de cargo en cargo en las grandes empresas de la ciudad. Era sucio en su accionar y grosero en la manera de tratar a sus subalternos. Era agresivo, marrullero, nada solidario y no tenía corazón. Gritaba, se exasperaba y maldecía. Desde un día empezó a mostrar su  peor síntoma: la fea costumbre de almorzar solo. Desde entonces, sin saberlo, comenzó a convertirse en un indigente profesional.

lunes, 2 de enero de 2012

La cosa política

La doctora Restrepo tenía un particular estilo político para hacer todas las cosas: hablaba, prometía, negociaba, cuadraba comisiones y finalmente sacaba provecho para sí. Julián, hombre con mente de campo pero con cuerpo de ciudad, la conocía muy bien. Por eso, al llegar a aquella cita, se hizo en un rincón de la oficina y guardó un silencio absoluto que pareció eterno. Al cabo de tres horas, la doctora creyó que estaba hablando sola, y terminó la reunión, según ella, porque no quería enredarse a sí misma.

domingo, 1 de enero de 2012

Amnesia

Beatriz tenía la extraña capacidad de hacer sentir mal a todo el que hablara con ella. Gilberto, su novio, era un hombre apasible, sencillo, callado y simple. Cierta noche, mientras ella le criticaba su facilidad para olvidar las fechas especiales y lo tildaba de amnésico, él decidió olvidarla para siempre.